Generación X (1966-1980): Workaholic, filosofía de vida.

Los nacidos en esta generación presentan como filosofía de vida el individualismo y adicción al trabajo. Esta generación representó un alto grado de rebeldía ante tradiciones, política y religión demostrando así nuevas conductas relacionadas con el matrimonio, educación, sexo y libertad.  También vivió el nacimiento de la era del internet y el alto consumismo presentado a inicios de los 80s.

Son fieles seguidores de la ‘flexibilidad’ laboral; y consideran algo “normal” que la oficina tenga un acercamiento al mundo del hogar, ya que lo asocian a una mejor calidad de vida y satisfacción. Para lograr esto, se deben hacer cambios en la configuración y diseño del mobiliario, incorporando acciones simples como incluir cortinas, almohadones y elementos decorativos.

Generación Z (1995-2010): Nativos Digitales.

La generación Z se presenta en la sociedad como un grupo de individuos nativos digitales.

Podemos identificar que se comportan, aprenden y piensan de una forma totalmente distinta a las generaciones anteriores.

Un informe* realizado por Microsoft en el 2020 comprobó que la Generación Z es -sin lugar a dudas-, la más ansiosa en volver a las oficinas después de la pandemia. Muchos de ellos se encuentran viviendo su primera experiencia laboral, por lo cual, la conexión física con el espacio de trabajo es de suma importancia. Sin embargo, nos preguntamos ¿Qué es lo que está impulsando esa urgente necesidad de conexión? Gran parte de la Generación citó en el informe, “una falta de oportunidad de desarrollo” por esta reticencia a permanecer con trabajo a distancia. Sin ir más lejos, este informe muestra que la mayoría de esta Generación han estado luchando con la falta de comunicación en persona, no solo por no estar completamente embebidos en la cultura laboral, sino porque entienden que el crecimiento profesional se da por medio de experiencias compartidas con colegas senior.

En un informe reciente, el 91% de individuos Millenials y 92% de Generación Z declararon la importancia de aprender de otros colegas en persona. Un espacio físico de trabajo es vital para conectar con las personas dentro de una organización, pero también debe apoyar la comunicación entre generaciones, ya que sin ese progreso puede generar un retraso en toda la empresa.

Un área donde las generaciones se alinean es el trabajo híbrido. Un informe reciente* mostro que el 52% de los trabajadores empresariales están buscando un lugar de trabajo flexible permanente. Es decir, un sitio que no solo ofrezca la comodidad de una oficina física sino también todo el soporte tecnológico necesario para un buen desempeño. 

Las organizaciones pueden alentar a los trabajadores a trabajar un par de días por semana a través de ofrecer un espacio de trabajo que se convierta en un destino colaborativo y creativo. Por medio de reuniones brainstorming, reuniones con clientes y trabajos de proyectos, generando un espacio de mayor productividad y flexibilidad, se abre un abanico de opciones para el empleado que habilita una mejor respuesta laboral.

Para concluir, está claro que cada generación tiene expectativas diferentes en cuanto a cómo debe ser su vida laboral. Sin embargo, lo que unifica a todas estas, es la necesidad de progresar profesionalmente, tener conexiones sociales y una capacidad de aprendizaje. Estos aspectos son sin duda facilitados por medio de un espacio de trabajo que está bien pensado. Es fundamental que los líderes se tomen el tiempo necesario para explorar como equilibrar las necesidades de sus empleados y que las líneas de comunicación estén abiertas. Las empresas también tienen que estar dispuestas a ofrecer lugares de trabajo flexibles, presenciales, que fomenten la creatividad, cultura y colaboración.