Biofilia

Se busca incorporar elementos del mundo natural en el diseño corporativo.

En estos tiempos donde vivir en la ciudad y estar cerca de la naturaleza es un privilegio de pocos y donde cada espacio verde se valora cada vez más resurge una tendencia arquitectónica llamada diseño biofílico que involucra al mundo natural invitándonos a lograr la reconexión con él a través del diseño. Adoptado por el biólogo especializado Edward O. Wilson en los años 80, se basa en que el contacto con la naturaleza es esencial para el bienestar humano porque es una conexión biológica innata y natural.

El ritmo de vida que llevamos en la ciudad hace que pocas veces dispongamos del tiempo necesario para estar en contacto con la naturaleza en nuestro día a día, algo que está comprobado de ser muy importante para el desarrollo psicológico del ser humano. Y esta tendencia que esta pisando fuerte se basa en la incorporación de elementos de la naturaleza en el entorno construido a fin de lograr un ambiente más saludable.

Se busca lograrlo incorporando distintos elementos del mundo natural como agua, vegetación, luz natural, y elementos materiales como la madera.

Ventanas más amplias y generosas que promuevan la entrada de luz natural, patios tanto interiores como exteriores que ofrezcan un cambio de ambiente generando un oasis dentro del ambiente laboral, así como la incorporación de plantas y flores en lugares estratégicos o paredes verdes (tendencia en el último tiempo), son algunos de los gestos que podemos tener a nivel diseño para promoverlo. 

La utilización de piedras, una paleta de colores con tonos verdes y neutrales, eligiendo formas más orgánicas en el mobiliario o en aplicaciones tanto en pisos como en paredes también son aspectos de diseño que fomentan esa calidad ambiental.

Sumar estos elementos en el espacio genera un cambio en la forma en que lo percibimos y nos relacionamos con el tanto en espacios individuales o colectivos, de interior o exterior. Incorporar a nuestro proceso de diseño nuestra inherente conexión con lo natural nos hará crear desde un lugar más responsable y repensar los ambientes orientados a un mayor bienestar tanto físico como mental.

Hacer del espacio de trabajo o nuestro hogar, lugares donde estamos la mayoría de nuestro tiempo, un espacio que promueva la relajación y el confort es una búsqueda que ya es parte de todo pensamiento proyectual. Generar sensaciones positivas en los usuarios es el fin de esta nueva tendencia, priorizando a los trabajadores y su bienestar.

Utilizar los distintos sentidos como los sonidos, olores o la conexión visual para sentirnos cerca de la naturaleza nos hace estar más conectados con el ambiente que nos rodea. Lográndolo también a través de texturas, tonalidades, patrones o materiales, así como con el contacto con el aire natural, la oxigenación del ambiente y la circulación del aire.

La creación de espacios de trabajo más saludables no solo para fomentar la vuelta al trabajo presencial y mejorar el bienestar humano en el ambiente laboral, sino que también el estar en un ambiente agradable es muchas veces un requisito para aquellas personas que están en búsqueda de un nuevo trabajo.

Dentro de los beneficios que la biofilia trae a las oficinas, se encuentra la reducción del estrés, una mejor concentración, positivismo, tranquilidad, calma y energía.

Con la adopción de la biofilia podemos contribuir a mejorar un ambiente de una forma social, psicológica, cognitiva, estética y ambiental. Estar en contacto con la naturaleza nos permite también volver a ser más conscientes y cuidar del mundo que nos rodea, así como promover mejores relaciones laborales.

Es importante crear espacios laborales que promuevan el bienestar, generando espacios saludables volviendo a poner a las personas en el centro. Estar a gusto en un ambiente laboral también genera una sensación de pertenencia que luego se traduce a un incremento en la productividad hacia los fines de las empresas. Un aumento de la productividad, creatividad y el fomento de las ganas de volver a la oficina reduciendo el absentismo.